El Gobierno Vasco dará ayudas a más de 10.000 personas en situación de vulnerabilidad extrema
La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, presentó, la semana pasada, en Vitoria-Gasteiz, el nuevo programa de atención urgente a las necesidades básicas de personas y familias que se encuentran en situación de extrema vulnerabilidad.
El Ejecutivo vasco cuenta para esta iniciativa con una partida presupuestaria que, enmarcada en el programa Hitzartuz, asciende a un total de 2,5 millones de euros. Con ella prevé llegar, tal y como anunció la consejera, a “unas 10.000 personas, lo que se traduce en aproximadamente 2.500 familias a las que podremos garantizar el acceso a bienes y servicios de carácter esencial”.
Este nuevo programa de ayudas, aseguró la consejera Artolazabal, “centrará de forma especial su atención en los hogares en los que residan menores o personas solas en situación de extrema vulnerabilidad; sin perder tampoco de vista el mayor riesgo de pobreza y exclusión que sufren las mujeres en todos los grupos de edad, así como las personas mayores”.
En función de la valoración individualizada que se haga de cada caso y del número de miembros que integren la unidad de convivencia, los importes entregados oscilarán entre los 150 euros (para unidades familiares de un miembro) y los 300 euros (para unidades familiares de cuatro o más miembros). Se realizarán, como máximo, tres entregas por año, excepto en casos de vulnerabilidad severa, que serán oportunamente estudiados.
TARJETAS MONEDERO Y APP MÓVIL
Cruz Roja Euskadi es, desde el 1 de enero y a través de cualquiera de sus delegaciones territoriales, la entidad encargada de coordinar la solicitud, revisión de requisitos y tramitación de estas ayudas.
Tal y como explicó su coordinador autonómico, Aitor Allende, serán destinatarias de estas ayudas “personas o familias con dificultades para cubrir sus necesidades por ingresos nulos o insuficientes” y tendrán prioridad de admisión “las familias que no tengan ningún ingreso y se valorarán las situaciones agravantes, como cargas familiares, cargas económicas (deudas, alquileres…) y situaciones excepcionales”.
Las ayudas serán distribuidas mediante dos vías combinables entre sí. Por un lado, se entregarán unas tarjetas monedero que podrán ser utilizadas en supermercados Eroski, Mercadona y Carrefour y en pequeños comercios de proximidad.
Por otro lado, las ayudas se canalizarán también a través de una aplicación móvil desde la cual las personas destinatarias podrán adquirir alimentos en perfecto estado que los comercios no han logrado vender a lo largo del día, beneficiándose de una rebaja de hasta un 70% sobre el precio original.
Con la habilitación de las tarjetas monedero, y, sobre todo, la canalización de las ayudas a través de la app Encantado de comerte, en la que las personas destinatarias conviven con personas ajenas al programa, se evita también, en palabras de Beatriz Artolazabal, “cualquier riesgo de estigmatización”.