El CESV recomienda reforzar el gasto público en salud debido al envejecimiento de la población
En el marco de los ‘Cursos de verano de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU)’, el
Consejo Económico y Social Vasco (CESV) presentó sus conclusiones de su
Memoria Socioeconómica 2023, en la que recomienda el
refuerzo del gasto en salud para adaptarse, en especial, al creciente envejecimiento de la población y al aumento de los trastornos mentales.
El Palacio Miramar de San Sebastián-Donostia acogió, recientemente, un encuentro centrado en el informe del CESV –que se desarrolló en colaboración con organizaciones sindicales, empresariales y otros agentes de la sociedad civil, entre las que se encuentra el Tercer Sector Social de Euskadi (TSSE)– donde se profundizó en alguna de sus claves. Un mes antes, el CESV había presentado de forma oficial su informe, en Lehendakaritza, en una reunión con el Gobierno Vasco, representado por el propio lehendakari, Imanol Pradales, y acompañado del Consejero de Hacienda y Finanzas, Noël d'Anjou.
En esta ocasión, en la apertura del evento celebrado en la capital guipuzcoana participaron el vicelehendakari Segundo y Consejero de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres; la presidenta del Parlamento Vasco, Bakartxo Tejeria; y el presidente del CESV, Javier Muñecas.
Entre las conclusiones y recomendaciones del CESV, en el el ámbito social, se señala que aunque la calidad de vida en la comunidad sigue siendo alta, persisten problemas como la pobreza energética y la falta de vivienda en alquiler asequible, lo que manifiesta la importancia de continuar apoyando a los colectivos más vulnerables.
Respecto al sistema vasco de protección social, la memoria destaca que se ha mantenido una cobertura comparable a la de los principales países europeos, con un aumento continuo en los recursos destinados. En este sentido, el CES vasco subrayó que el II Plan Estratégico de Servicios Sociales (2023-2026) deberá adaptarse al envejecimiento de la población, mientras sigue apoyando a los colectivos vulnerables.
En el ámbito económico, a pesar de un entorno marcado por la inflación y la incertidumbre global, aseguraron desde el CESV, “Euskadi ha logrado un crecimiento del PIB del 1,8%, aunque persisten desafíos como la alta temporalidad en el empleo público y la baja tasa de actividad laboral que presenta Euskadi, especialmente entre mujeres”.