La dirección y el equipo de la entidad antes conocida como BJ Adaptaciones se acaba de convertir en Qinera, una decisión estratégica que permite evolucionar su proyecto empresarial y social. 

A partir de este mes de mayo, la empresa transforma su forma fiscal pasando a ser una cooperativa en lugar de una sociedad limitada. Esta iniciativa es un paso natural de la misión inicial de Qinera, “cuyos fundadores, Joaquín y Borja, concibieron esta compañía como un proyecto social, tanto en su visión de crear un mundo más inclusivo, como en la dimensión económica, en coherencia con su misión y responsabilidad corporativa”, aseguran en un comunicado.

El actual director, Borja Romero, continuará realizando sus mismas funciones como hasta la fecha, de la misma forma que el resto del equipo humano.

Los trabajadores de Qinera concuerdan con que esta nueva forma societaria es más coherente y acorde a lo que la empresa es en realidad: “un proyecto sostenido por personas comprometidas con la misión de crear una sociedad más igualitaria e inclusiva, que a su vez busca proponer alternativas a un modelo económico que genera desigualdades y descuida nuestro planeta”.

Este cambio no modifica el funcionamiento del día a día de la empresa en cuanto a las soluciones y servicios prestados, “sino que consolida el compromiso del equipo de Qinera en el proyecto y con sus usuarios”, indican desde la entidad.