Sábado, 20 de Abril de 2024 | Teléfono: 986 438 020
Atrás

FERNANDO FANTOVA / CONSULTOR SOCIAL

'Para los servicios sociales, el momento actual es una encrucijada estratégica'

Fantova afirma que nos estamos dando cuenta de que los servicios y apoyos para la autonomía y la convivencia requieren de un tratamiento tan universal y profesional como el que tiene el sistema sanitario

Cristina Villanueva 07-09-2021

COMPARTIR
PREGUNTA.- El concepto de servicios sociales en España ha evolucionado mucho en los últimos 20 años. ¿En qué punto estamos y hacia dónde debe avanzar el modelo?  

RESPUESTA.- Hay que entender que los servicios sociales como tal en España empiezan a tomar carta de naturaleza a partir de la aprobación de las leyes autonómicas en el año 1982 y los siguientes. Así van adoptando esa denominación de servicios sociales, que curiosamente en la Constitución se denomina como asistencia social, pero las leyes toman la denominación de servicios sociales. Esa es un poco la referencia, las leyes autonómicas que recogen esta denominación para un conjunto de servicios que han evolucionado mucho. 
Hace algo menos de 20 años, el gran giro viene con la aprobación de la Ley de Dependencia, que recupera y potencia el papel de la Administración general en los servicios sociales. En estos 20 años, lo que ha sucedido es que llegó una crisis en 2008 y después llegó la pandemia en la que nos encontramos. Por todo esto, el momento actual es una encrucijada estratégica y casi existencial. En este sentido, los servicios sociales tienen dos posibilidades: una es, partiendo del concepto de asistencia social, definirse a si mismos como unos servicios de atención, pero para aquellas personas que no puedan obtenerla por otros medios. La otra versión, que es la que me parece más acertada, es que los servicios sociales son otra rama más, como los sanitarios, la educación, que tiene su propio contenido. 
Entenderíamos que las necesidades de subsistencia material, como pueden ser ayudas para alimento, vestido, se obtiene en la Seguridad Social, las políticas de vivienda se encargarían de los alojamientos y queda para los servicios sociales aquellos cuidados y apoyos que tienen que ver con la autonomía de las personas, su proyecto de vida y su inserción familiar y comunitaria. De esta forma, podrían ser unos servicios sociales universales.

P.- Usted es un gran defensor de la coordinación entre los servicios sociales y sanitarios. ¿Cómo se puede lograr una buena y efectiva integración de estos dos espacios? 

R.- El problema es de fondo, de concepto previo. Si los servicios sociales se definen por tener encomendados una serie de apoyos y los sanitarios por otros, la integración entre ambos pilares se logrará delimitando qué cuidados da la parte social y cuáles la sanitaria. Sin embargo, si aceptamos la definición de servicios sociales como camión escoba, un espacio residual que se hace cargo de lo que los demás dejan, es cuando no funciona bien y no se podrá coordinar. 
Durante la pandemia, el sistema sanitario probablemente entendió que no tenía posibilidad de atender a las personas en las residencias y que era lógico que les cuidaran en el centro en el que vivían, porque tienen ese concepto de red de apoyo integral. Pero es al contrario, las residencias tienen una serie de responsabilidades, pero la atención sanitaria es de Salud. Se puso de manifiesto que no había una lógica compartida, no hubo acuerdo en lo que debían hacer. Esto desde mi punta de vista tiene que ver con esa simetría de un sistema como sanidad que ha ido definiendo su carácter universal y otro, que es servicios sociales, que se ha quedado como un sistema residual de última red que, en principio, puede ocuparse casi de cualquier cosa. Pero nos estamos dando cuenta de que los servicios y apoyos para la autonomía y la convivencia requieren de un tratamiento tan universal y profesional como el que tiene el sistema sanitario.

P.- ¿Los servicios sociales comunitarios pueden ser la respuesta a muchas de las carencias actuales en la atención a algunos colectivos?

R.- El enfoque comunitario es muy pertinente en todas las ramas del estado de bienestar, en educación, sanidad, vivienda y también en servicios sociales. Porque el ser humano por naturaleza es social y busca apoyo por parte de sus familiares en el entorno comunitario. Por lo tanto, arropar a los ciudadanos en el entorno social y comunitario es muy importante, siempre y cuando la persona sea libre para decidir lo que quiere hacer. De alguna forma, las personas tendemos a escoger convivir o compartir recursos con personas próximas. Por lo tanto, todos los servicios deberían ser comunitarios, pero que no sustituyan a los vínculos que las personas tenemos, sino que los refuercen y complementen. 



Tlfno: 986 438 020 | contacto | aviso legal