STIMA Centros de día está aplicando una innovadora terapia de Realidad Virtual (VR) con las personas mayores en sus diversos centros de la Comunidad de Madrid. De esta manera, y a través de unas gafas VR de última generación, se introduce al usuario en un entorno virtual "para darle estímulos visuales, auditivos, posturales, cognitivos… que le ayuden a conseguir sus objetivos de tratamiento y a realizar actividades que le resulten más gratificantes", explica la directora de Operaciones de STIMA, Patricia Del Barco.

Para cumplir estas metas, no solo se utilizan las gafas VR, “también se usan otros dispositivos como sensores de movimientos, pantallas o sala completas que crean entornos virtuales”, señala Del Barco. A través de estas herramientas tecnológicas, se consigue trabajar aspectos como la orientación espacial, las actividades de la vida diaria, la memoria o las funciones ejecutivas, entre otros muchos. 

Así, y como en otras terapias, la entidad ayuda a las personas mayores en el mantenimiento o la mejora de sus capacidades funcionales, su estado cognitivo y su estado físico. “Además, de forma específica por las características de la VR, pueden trasladar lo que se trabaja en los centros a su vida diaria de una forma mucho más sencilla que con otro tipo de terapias”, asegura la directora de operaciones que, añade, “permite también que podamos ponerlos en situaciones muy similares a la realidad y de esta forma es más fácil para ellos que el tratamiento les motive”.

Pero, ¿qué tipo de proyecciones visualizan los usuarios con las gafas VR? "Dependen del objetivo que tenga la terapia y del programa que se use", indica Del Barco. Durante la terapia pueden ver diversas proyecciones, "de su vida, de historia, de espacios reales que simulen cuartos de una casa, de una ciudad o de un espacio conocido", menciona. También pueden ser proyecciones abstractas "que visualicen movimientos del propio usuario para que intente controlarlos". Las gafas VR permiten que los mayores interactúen con las proyecciones: "Pueden moverse por el espacio, intentar tocar o coger cosas, realizar actividades cotidianas u otras muchas actividades", describe la directora.

STIMA Centros realizan sesiones de estimulación con sus usuarios, que están incluidas en los talleres semanales de la entidad. "Son sesiones de una hora de duración máxima, se realizan de forma individual o con un grupo muy reducido de personas, entre dos y cuatro personas", especifica Del Barco. Aunque se llevan a cabo habitualmente, no hay marcada una frecuencia ya que dependen de la aceptación y las necesidades des cada usuario.

Para dirigir estas sesiones, Stima Centros de día cuenta con trabajadores formados en el uso de la VR. Muchos de ellos a través de la propia formación universitaria que incluye este tipo de intervenciones, pero otros, apunta la directora, con una formación especifica "que incluye la de los entornos virtuales o el uso de la sala Snoezelen".

Los objetivos a corto plazo de esta terapia guardan relación, primero, con la aceptación del dispositivo por parte de las personas mayores: "Conseguir que se adapten cuanto antes a las gafas y a las imágenes que se proyectan", explica Del Barco. A medio plazo, y dependiendo de la patología que se quiera tratar, los resultados a alcanzar pueden ser en relación a aspectos cognitivos, físicos, funcionales o incluso sociales.

Stima Centros de día apuesta, en general, por las nuevas tecnologías en todos sus tratamientos, tanto con la VR como con otras técnicas. “Pensamos que no es positivo para el mayor realizar siempre actividades con métodos tradicionales”, subraya Del Barco. 

Para la entidad es muy importante evitar el aburrimiento que supone realizar las mismas terapias y, para ello, necesitan adaptarse a los avances de la sociedad para dar respuesta a todo tipo de niveles educacionales, culturales y sociales. Con esta intención, explica la directora, “decidimos incluir una sala Snoezelen en nuestro centro de día STIMA Embajadores, la primera en un centro de día privado en Madrid, sala que también permite crear entornos virtuales que produzcan una estimulación sensorial añadida”.