La Associació Catalana de Recursos Assistencials (ACRA) celebró ayer los 19º Premios ACRA para la mejora del bienestar y la calidad de vida, una edición  marcada por la recuperación de la presencialidad después de la pandemia y por el reconocimiento a la doctora Magda Campins por su labor frente a la Covid-19 y por la cooperación con el sector de atención a las personas mayores. A la gala asistieron unas 200 personas, encabezadas por la consellera de Derechos Sociales, Violant Cervera, y la presidenta de ACRA, Cinta Pascual.

La gala de este año posiblemente haya sido una de las más participativas que se recuerden, con el actor Quim  Masferrer actuando como maestro de ceremonias, interactuando con un público formado por profesionales del sector que han llenado buena parte del auditorio del Cosmocaixa. 

"Me siento muy orgullosa de este sector y quiero felicitar a sus profesionales, todas las personas que formamos parte", explicó Cinta Pascual en el discurso de bienvenida. La presidenta de ACRA recordó los peores días de la pandemia, pero también ha hablado de futuro, de la imprescindible cooperación con las  administraciones y de la necesidad de que haya una mayor coordinación sociosanitaria para atender mejor a las personas mayores que tienen dependencia.

El Premio ACRA a la mejora de la calidad ha sido para el proyecto titulado 'La esencia de las actividades', a cargo de la Residencia Sigma Salud, una transformación de las actividades residenciales mediante la participación activa de usuarios, trabajadores y familias. 

Por otra parte, el Premio ACRA a la innovación ha ido a parar  al proyecto 'En Bici Sin Edad: El derecho a sentir el viento en la cara', realizado por la Asociación en Bici sin Edad, un programa de voluntariado social consistente en paseos en triciclos adaptados para personas mayores.