Pregunta.- ¿Cómo valoran desde la Asociación que el Gobierno vaya a congelar las pensiones el próximo 2011 teniendo en cuenta que España ya es uno de los países de Europa occidental con las rentas más bajas?

Respuesta.- En primer lugar, será un incumplimiento de la Ley. El Artículo 48 de la Ley General de Servicios Sociales contempla la revalorización automática de las pensiones. No es un premio que concede el Gobierno, sino una obligación impuesta por Ley. Y habrá que ver si puede cambiar esa Norma que afecta a más de 8,5 millones de pensionistas. Podemos decir que es un castigo más que se aplica a la parte indefensa de la sociedad. Los pensionistas no podemos elegir a nuestros representantes, y así nos va. El Gobierno lo sabe y se aprovecha de ello. Por Ley, esta tarea está asignada a los llamados Agentes Sociales -o sea, los sindicatos--, de los que no podemos decir que hayan hecho mucho en nuestra defensa en los últimos años. Además, esta rebaja del poder adquisitivo, porque la inflación sigue subiendo y al cobrar lo mismo puedes comprar menos, se suma al disparate de la “actualización negativa” del año 2009, por la que los pensionistas pasamos a cobrar menos cuando nos aumentaron el 1%. No es un trabalenguas. En nuestra web “www.jubiladosbp.com” se puede comprobar con una nómina real. Le aumentan 9,54 y cobra 6,74 euros menos. La “víctima” perdió por el camino 16,28 euros en enero 2009.

P.- ¿Por qué consideran que este anuncio supone un incumplimiento por parte del Gobierno del Pacto de Toledo?

R.- Muy sencillo. El Pacto de Toledo recomendó la separación de fuentes en la financiación de las pensiones. Esto es: las pensiones contributivas se financian con las cotizaciones de los trabajadores, en tanto que las no contributivas se cargan contra impuestos. Para aclarar la diferencia, diremos que los impuestos -no contributivas- se gestionan a través del la Ley de Presupuestos, que el Gobierno puede adaptar según sus necesidades o conveniencias. Sin embargo, las pensiones contributivas proceden de las cotizaciones de los trabajadores. Son devolución de parte de la inmensa fortuna que ahorró el trabajador cotizando durante toda su vida laboral, y en su cálculo intervienen los años cotizados y la tarifa de cotización, pero no la conveniencia del Gobierno de turno. Para hacer esto, habría que modificar el Sistema de Pensiones. Eso que hablan del retraso hasta los 67 años y los 25 años de vida laboral, entre otras cosas, con lo que tanto marean y nada resuelven. Como conclusión del absurdo que pretende el Gobierno: si se congelan las pensiones, se producirá más superávit... que deberá ir, por Ley, al Fondo de Reserva. Porque el superávit de la Seguridad Social está regulado por la Ley 28/2003, y ordena que se ingresen en el Fondo de Reserva -en el que, por cierto, faltan por ingresar 13.000 millones de euros de los años 2008 y 2009-. ¿Va a pagar el Gobierno el déficit del Estado con el Fondo de Reserva? Sería otro disparate más que la Ley no contempla.

P.- ¿Cree que estas medidas son adecuadas para saldar el déficit nacional?

R.- Desde luego que no. Cualquier trabajador o pensionista, sabe que una compra a crédito hay que devolverlo. Y si no puedes aumentar los ingresos, tendrás que reducir los gastos. Ese mismo razonamiento vale para el Gobierno. Si ingresa 100, no puede gastar 120. ¿Cómo se ajusta el déficit del Estado? Gestionando mejor el gasto. Lo que pasa es que el Gobierno confunde el gasto con la inversión. Para que el Estado funcione hacen falta gestores. Y esa mano de obra -en funcionarios- hay que pagarla. Por tanto, las nóminas de los trabajadores no son la principal causa del déficit. ¿No hay ningún gasto superfluo que eliminar? Por qué no hablan de asesores, coches oficiales, televisiones y radios públicas, dietas, subvenciones, etcétera.